lunes, 8 de julio de 2013

CÓMO SER FELIZ CON TU PAREJA

Tienes novio o estás pensando en tenerlo, y por supuesto comienzas a preguntarte cómo ser feliz con tu pareja.


CÓMO SER FELIZ CON TU PAREJA


Claro, saber cómo ser feliz con tu pareja no es un tema sencillo, no hay recetas mágicas y lo que puede servir para una pareja puede no servir para otra.

Sin embargo, sí hay algunas reflexiones qué hacer respecto al tema que te pueden ayudar a ser feliz en tus relaciones de pareja.

Mi primero que nada, te diré algo que no te va a gustar nada:


ES MÁS FÁCIL ESTAR EN LA INFELICIDAD QUE EN LA FELICIDAD



Y aunque te duela o te moleste, es absolutamente cierto. Cualquiera puede tener peleas de pareja, cualquiera puede enojarse, cualquiera puede culpar; pero mantener una relación de pareja estable y feliz requiere trabajo.

Por eso, si tú te estás preguntando cómo ser feliz con tu pareja, comienza por preguntarte si realmente estás preparada(o) para ser feliz.

¿Qué significa esto? Es simple, la felicidad es un estado que podría estar inmerso en toda nuestra vida, no sólo en nuestras relaciones de pareja, sino también laborales, de amistad, familiares, etc., pero a veces se le teme. Aunque suene extraño así es, mucha gente tiene miedo de ser realmente feliz.

Y es que ser infeliz tiene sus recompensas, la más significativa de ellas es que siendo infeliz estás siempre acompañado. Si te peleas constantemente con tu pareja siempre tendrás a la amiga o la madre que escuche tus quejas, si cortaste con tu novio siempre habrá alguien que consuele, que te quiera distraer, que te ponga atención.

En cambio, el éxito y la felicidad son hechos solitarios. Lo que tú llames éxito siempre dependerá de ti, incluyendo el éxito en tu relación de pareja. Claro, siempre hay personas que te apoyan, te dan ánimos, te acompañan; pero el resultado final depende de ti. Por ejemplo, cuando haces una tesis para titularte, siempre habrá familiares y amigos que te echen porras, te presten algún libro o te pasen algunos apuntes; pero el trabajo lo haces tú, quien se desvela eres tú, quien escribe eres tú, quien hace el esfuerzo eres tú y por lo tanto quien obtiene el éxito eres tú.

Hay miles de personas en el mundo que tienen todo el apoyo para seguir adelante y obtener éxito y aún así no lo logran. Porque el éxito requiere trabajo y esfuerzo, y aveces estamos en dinámicas negativas y conformistas que nos impiden ser felices y alcanzar el éxito.

Cuando una persona no es feliz y vemos que siempre se victimiza culpando a los demás de sus fracasos, lo que vemos es sólo la punta del iceberg, lo que hay detrás requiere todo un trabajo personal para poderlo desenredar.

Aunque claro, una pareja es una relación de dos, y por lo tanto los dos tienen la responsabilidad de trabajar juntos para conseguir la paz, la tranquilidad y la estabilidad. Y para ello hay que revisar su sistema familiar.

Hay una lista de cosas que son fundamentales para que una pareja pueda ser feliz:

1. Que cada uno respete el sistema familiar del otro.


Cuando nos relacionamos con una pareja estamos relacionándonos con todo un sistema familiar, y ello implica que debemos respetar ese sistema por la simple y llana razón de que sin esa familia no habríamos conocido a nuestra pareja, esa familia le dio la vida.

Si nos dedicamos a atacar y hablar mal de la familia de nuestra pareja, estamos hablando mal de una parte de nuestra pareja. Si nos molestan las costumbres cotidianas de nuestra pareja, entonces en realidad nos molesta su vida entera, porque esas costumbres son la herencia de su familia: la forma en que lava los trastos, cocina, tiende su cama, si es ordenada o no, si se desvela o no, si habla mucho o poco. Todas esas acciones son una rica herencia que hay que aprender a valorar.

Si no respetas un sistema familiar porque tu propio sistema no te lo permite, entonces hay incompatibilidad. Si no se puede aprender a valorar esa herencia, entonces hay que buscar a alguien más a fin a nuestra propia herencia (aunque eso debería hacerse antes de relacionarse como pareja).

2. Que haya independencia emocional de los padres


Muchas veces como hijos ocupamos un lugar en la familia que no nos corresponde. A veces nuestra madre es madre soltera o nuestro padre viudo, y creemos que nosotros como hijos debemos ocupar ese lugar y cuidar de nuestros padres.

Si nosotros ocupamos ese lugar que a nosotros nos parece vacío, en vez de reconocer que nuestros padres son adultos y que pueden encargarse de sí mismos sin nuestra ayuda, entonces no podremos ser felices en una relación de pareja. Porque en vez de estar con nuestra pareja, convivir con ella, darle el lugar que merece, la estaremos haciendo a un lado para ocuparnos de nuestros padres.

Por eso es que a veces conocemos relaciones de pareja que nunca pudieron funcionar, porque ella prefería pasar todos los días viendo la telenovela con su mamá que ir al cine con el novio, o porque él dejaba a la novia a mitad de la tarde para lavar el coche de papá. O casos en donde estando comprometidos, alguno de los dos da pretextos para no cumplir su compromiso con frases como "si dejo a mi papá se muere" o "si me voy de la casa mamá moriría de tristeza".

3. No hablar mal de los ex


Hablar mal de los ex es hablar mal de las decisiones de nuestra pareja y es hablar mal de nuestro presente como pareja. ¿Por qué? porque una de las razones por la que una pareja está junta, es porque antes hubo pérdidas que llevaron a que se conocieran: "hoy estoy contigo porque tiempo atrás tuve que decirle adiós a otra persona".

Sin todos esos ex no estarían juntos, y eso hay que tenerlo en cuenta. Por otro lado, ¿por qué querrías hablar mal de una persona a la que ni siquiera conociste? ¿por qué querrías hablar del pasado de tu pareja si tú eres el presente? ¿para qué querrías saber detalles de su relación pasada si la relación que lleva contigo es diferente?

Aunque como dijimos antes, no hay recetas que nos digan a ciencia cierta cómo ser felices con nuestra pareja, estos consejos pueden ayudarte a trabajar más para mejorar tus relaciones.

Si notas que nuestras algunas de las conductas mencionadas, bien valdría la pena examinarse y averiguar si se trata de algún patrón que llevamos a cabo en todas nuestras relaciones, y acudir con algún terapeuta en caso necesario.

No hay comentarios:

Publicar un comentario